Emocionado revisé mi papeleta en medio de la molestia de las mujeres en la mesa de votación (quería ver que no estuvieran marcadas como sucedió en una mesa en la mañana según el T.S.E.) y con una sonrisa en mi casa voté arriba al centro (exactamente).
Gane o no gane al final la mayoría decide (ya sea para bien o para mal), pero estoy feliz y orgulloso de vivir en un país como este.
Nuevamente espero ir mas tarde y esperar en la noche cual será el resultado final.
2 comentarios:
y seguimos esperando...
Estos momentos no son para una impaciente como yo. Adiós mis uñas. Y mi manía de arrancarme el pelo en situaciones de tensión ha empeorado.
Como vamos, ya ganamos. Sea o no Ottón presidente.
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