7.6.05

Preocupado



Creo que ayer me paso lo peor que me ha pasado en tiempos, creo que no es conveniente contarlo por acá, pero bueno, el fin es de que estoy demasiado preocupado.

Aunque puede ser que no pase nada, todo esta fuera de mi control y de mi vista, así que si ha de suceder algo solo sucederá y quedare como el "cara de picha" mas grande y lo peor es que fue sin querer.

Pero bueno, el problema no es directamente conmigo, sino que otra persona sale perjudicada, en fin, no se si decirle a esa persona o no, ya que como dije anteriormente puede ser que no suceda nada y me esté preocupando mas de la cuenta.

Creo que mi cara ayer era exactamente la que está en la imagen de hoy.

En fin, ¡espero que no suceda nada! mejor hablo de otro asunto para tratar de olvidar esto.

El jueves tengo que realizar una locución en radio de un poema, anuncio o cuento y creo que me decidí por un cuento de Cortazar que me encanta, el "Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda a un reloj" y si es muy pequeño para la profesora le agrego las "Instrucciones para dar cuerda a un reloj" y listo.

Tenía pensado también en lugar de este leer el Capítulo numero 7 de Rayuela, pero creo que ocuparía una voz sensual, tons mejor leo el otro, jaja.

Por el momento me queda poco tiempo acá en esta empresa.

El sábado me sentí super triste ya que mi linda amiga Aimee se fue a vivir a Argentina, espero que todo sea un éxito, creo que no va a tener ningún problema para sobresalir, ya que ella es una mujer super inteligente y espero poder ir a visitarla pronto a Buenos Aires.

Les dejo el preámbulo para que se entretengan leyendo un rato.

Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj

Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan -no lo saben, lo terrible es que no lo saben-, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca.

Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico.

Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.

Julio Cortazar; Historias de cronopios y de famas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola guey! Que fue lo que paso que no me has contado? Gracias por el comment, de hecho sepa ud que me dio mucha melancolia despues de haberlos dejado... Pero pronto nos veremos espero!